Painted: Arsene Dzhanikyana
Un yogui hindú
Desesperado por el silencio de la divinidad, juró un día:
- ¡OH Dios, si no te me apareces en los tres próximos días, dejaré de comer!
- Durante los tres días siguientes pasó una mendiga, después un loco y, por último, un perro vagabundo. Al cabo de cuarto día, la divinidad se le apareció al yoguí, que exclamó:
- ¡Ah! !Aquí estás por fin!
- La divinidad le respondió:
- Por tres veces he venido a verte y tú no me has reconocido! ¡Yo era la mendiga, era el loco y era el perro vagabundo!
Mensaje
Si estamos con los ojos bien abiertos en la vida, en lo que hacemos y en lo que nos aporta los demás y hasta las cosas y lo animales, podemos sacar algo de aprendizaje de ello, a mí por ejemplo en mi experiencia más cercana, mi reciente y difunta gatita Sofi, me enseño a valorar la vida, en el sentido de que la vida es corta y que la podemos perder en cualquier momento.
Alejandro Jodorowsky
La Sabiduria De Los Cuentos